Aumento de pechos con la propia grasa del paciente
Clínica Riba te ofrece una nueva opción para aumentar el volumen de tu pecho, natural y sin prótesis.
El aumento de pechos con tu propia grasa consiste en utilizar tejido graso de la propia paciente para luego mediante infiltración conseguir rellenar el tejido subcutáneo del pecho y estirar levemente la piel. Esta re-estructuración lipídica, es un principio que se usa muy eficazmente en otros tratamientos de estética muy reconocidos hoy en día como el lipofilling o el nanofat.
Aumento de pecho sin pasar por el quirófano
El aumento de pechos con la propia grasa del paciente es uno de los tratamientos que más está creciendo en demanda de las consumidoras. Las pacientes que eligen esta técnica suelen ser mujeres que por diferentes motivos quieren evitar el paso por el quirófano.
Con esta técnica se evitan además costes de ingreso en clínica, honorarios de anestesistas y personal sanitario, consiguiendo que el aumento de pecho resulte muy económico.
Si bien los resultados son más discretos que utilizando una prótesis, en algunos casos donde no se quiera una gran aumento es una solución perfecta.
También es un tratamiento ideal para aquellas mujeres que debido al paso del tiempo han visto como sus pechos empiezan a decaer, perdiendo firmeza y elevación.
Aumento de pechos con la propia grasa
- Sin prótesis
- Resultados muy naturales
- Sin intervención
- Sin post-operatorio
- Sin cicatriz de inserción
- Rápida y sencilla
Cuidados posteriores
Se te indicarán estas recomendaciones al hacerte el aumento de pechos con grasa propia:
- Drenaje linfático manual y suave en la zona tratada
- Evitar la exposición solar durante 1 mes
- Hidratación
- No realizar ejercicios físicos durante los primeros 30 días.
Perfecto con hidrolipoclasia
El aumento de pechos con la propia grasa del paciente es una práctica perfectamente compatible con la hidrolipoclasia, la llamada liposucción sin cirugía.
Al mismo tiempo que re-modelas tu cuerpo, aumentas ligeramente el volumen de tus pechos.
Además con las dos técnicas conjuntas los costes se reducen sensiblemente.
El proceso de infiltración de la grasa debe ser hecho por manos expertas, ya que se necesita una colocación exacta para reducir la posibilidad de re-absorción por el organismo.