En invierno el esquí es uno de los deportes más practicados en nuestro país. Además de ser una manera de desconexión de la rutina y una buena excusa para disfrutar con amigos, pareja o la familia; el esquí estimula la tonificación de los músculos y favorece la buena circulación sanguínea y linfática. Ayuda a eliminar la celulitis puesto que el movimiento realizado nos hace trabajar las zonas de mayor acumulación de tejido graso.
Te dejamos algunos consejos si decides irte de fin de semana o escapada a esquiar.
Una buena alimentación en un día de esquí es primordial.
El desayuno será nuestro pirmer aporte energético para comenzar el día. Es importante no saltearlo y podemos elegir café, zumo y tostadas.
A la hora de la comida se recomienda ingerir hidratos de carbono como la pasta que es de digestión lenta y nos ayudará a reponer energía para el resto de la jornada. Una segunda opción es el arroz. La comida no ha de ser copiosa, no se debe beber alcohol puesto que nuestros reflejos han de estar en pefectas condiciones.
Podemos elegir llevar un tentempié si no queremos parar a comer. Las posibles opciones son: frutos secos y barritas de cereales que nos aportarán las proteinas consumidas. Además de un sandwich al mediodía.
La cena será un momento de relax. De primero una sopa, luego pescado y ensalada son un buena opción. Para el postre queso o cualquier lácteo.
Llevar encima frutos secos, galletas de arroz ó bebidas energéticas son importantes por si es necesario reponer energías durante el día.
El cuidado físico es fundamental, para ello es importante saber las posturas correctas a la hora de practicar esquí.
1- Las piernas estarán separadas al ancho de las caderas, las articulaciones semi-flexionadas, manos separadas del cuerpo y adelantadas. El torso tenderá a mantenerse a la máxima pendiente.
2- Los tobillos al flexionarlos pisan el esquí y éste describe una curva.
3- Las piernas se pueden distender para hacer que nuestro centro de gravedad se desplace de manera natural al interior de la curva.
4- La mirada ha de estar centrada en la pendiente durante todas las fases de la curva.
5- Al final de la curva relajaremos poco a poco las piernas ésto nos permitirá esquiar de forma más fluida.
6- El clavar el bastón a la máxima pendiente nos hará esquiar adelantados y dirigir mejor la masa de nuestro cuerpo hacia la próxima curva.
7- Es importante sentir que pasa entre nuestros pies y la nieve. Nuestro equilibiro plantar nos ayudará a manejar mejor las fuerzas externas que se van generando durante el viaje.
Disfruta del deporte que además de aportarte vitalidad y un mejor estado físico es la mejor receta contra el estrés y las preocupaciones!!
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